Amanecía ya con la hora cambiada y aún así a las 6:30 horas ya estaba en pie. Prepararme, vestirme, baño y una vez finalizado este proceso diario, directo a la cafetería de guerra. Allí me preocupé de tomar un desayuno que me confortara y el cual me proporcionara energías suficientes para la carrera. Tomé un buen dulce de cabello de ángel con una manzanilla. Finalizado este desayuno con destino al sur a Maspalomas.
Allí, llegué con tiempo de sobra, como por otra parte es costumbre en mí. Me dispuse a observar las instalaciones, visité el baño para expulsar los líquidos y luego ya busque un lugar apartado donde pudiese tener tranquilidad y concentrarme de lo que tenía por delante.
Intenté estirar aunque la temperatura no ayudaba mucho, hace fresco. Después de saludos a viejos amigos/as llegó el momento de la salida. Ésta primera parte (bien larga) fue neutralizada. Posteriormente dieron la salida oficial y a correr se dijo.
En mi caso corría con las piernas “lógicamente” pero más con cabeza. Sabía que el tema se resolvería a partir de media carrera en adelante. Así, fui reservando consciente de esto, aunque viendo a los corredores que tenía a mi lado pude comprobar que llevaba muy buen ritmo y con ello una buena marca.
Me pegué a corredores de “élite” y detrás de ellos subía y subía, hasta que llegados a media carrera nos encontramos con el tramo en cuestión. Allí, por veces, nos veíamos obligados a caminar, no había otra.
También es verdad que aunque algunos siguieron trotando flojo, yo con mis piernas largas y buena zancada amortizaba ese esfuerzo y caminando no perdía referencia con ellos.
Más tarde, llegó el momento de la bajada. Aquí decidí agrandar la zancada y en ese terreno de piedras y otros, se bajar bastante bien. Resultó así, allí cojí ventaja y dejé a los demás corredores atrás, tanto que hasta la línea de meta, ninguno llegó a darme alcance. En dicha bajada, tuve la suerte de ir en compañía de un chico que posee buena técnica de carrera y juntos marcamos una fuerte velocidad hasta la línea de meta.
Entré en meta como siempre y como por otra parte no puede ser de otra manera, así al menos lo entiendo yo, al sprint. El tiempo final; 01:38:10 a (4:41) quedando 5º de mi categoría y 10º de la general.
Me he encontrado físicamente fuerte y mentalmente muy controlado y con buenas decisiones. He disfrutado de la carrera, me gustó. El recorrido, las vistas muy agradables. A todo ello, acompañaba una muy buena organización. Así es un placer competir.
Ahora a descansar al menos unos cuantos días (7) y luego volveremos a comenzar con vistas a los siguientes objetivos: Media Maratón del Puerto de Las Palmas (21 Km.) 10/05/2.009 y II Cross Urbano San Isidro (3.150 m.) Ingenio 16/05/2.009
Allí, llegué con tiempo de sobra, como por otra parte es costumbre en mí. Me dispuse a observar las instalaciones, visité el baño para expulsar los líquidos y luego ya busque un lugar apartado donde pudiese tener tranquilidad y concentrarme de lo que tenía por delante.
Intenté estirar aunque la temperatura no ayudaba mucho, hace fresco. Después de saludos a viejos amigos/as llegó el momento de la salida. Ésta primera parte (bien larga) fue neutralizada. Posteriormente dieron la salida oficial y a correr se dijo.
En mi caso corría con las piernas “lógicamente” pero más con cabeza. Sabía que el tema se resolvería a partir de media carrera en adelante. Así, fui reservando consciente de esto, aunque viendo a los corredores que tenía a mi lado pude comprobar que llevaba muy buen ritmo y con ello una buena marca.
Me pegué a corredores de “élite” y detrás de ellos subía y subía, hasta que llegados a media carrera nos encontramos con el tramo en cuestión. Allí, por veces, nos veíamos obligados a caminar, no había otra.
También es verdad que aunque algunos siguieron trotando flojo, yo con mis piernas largas y buena zancada amortizaba ese esfuerzo y caminando no perdía referencia con ellos.
Más tarde, llegó el momento de la bajada. Aquí decidí agrandar la zancada y en ese terreno de piedras y otros, se bajar bastante bien. Resultó así, allí cojí ventaja y dejé a los demás corredores atrás, tanto que hasta la línea de meta, ninguno llegó a darme alcance. En dicha bajada, tuve la suerte de ir en compañía de un chico que posee buena técnica de carrera y juntos marcamos una fuerte velocidad hasta la línea de meta.
Entré en meta como siempre y como por otra parte no puede ser de otra manera, así al menos lo entiendo yo, al sprint. El tiempo final; 01:38:10 a (4:41) quedando 5º de mi categoría y 10º de la general.
Me he encontrado físicamente fuerte y mentalmente muy controlado y con buenas decisiones. He disfrutado de la carrera, me gustó. El recorrido, las vistas muy agradables. A todo ello, acompañaba una muy buena organización. Así es un placer competir.
Ahora a descansar al menos unos cuantos días (7) y luego volveremos a comenzar con vistas a los siguientes objetivos: Media Maratón del Puerto de Las Palmas (21 Km.) 10/05/2.009 y II Cross Urbano San Isidro (3.150 m.) Ingenio 16/05/2.009
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